martes, 15 de junio de 2010

Como ser feliz sin dejar de ser Mona 3



Mona recorrió el pasillo apresuradamente, entró en el dormitorio que le había asignado tía Lita, ese que compartiría con Cristal..
Las paredes estaban recubiertas de un papel estampado,repleto de flores ya descoloridas por los años, a la derecha dos camas pequeñas  y frente a ellas un armario de dos puertas, estaba lacado en blanco aunque su color era ya amarillento, los dorados de las molduras habían perdido todo su  antiguo esplendor..
Un pequeño tocador repleto de pinturas, collares, pendientes.. con un espejo del que colgaban varias pelucas.
Las camas estaban separadas por una cortina ya raída y mugrienta... ahora  ni siquiera le interesaba  saber que se escondía detrás de ella...estaba perdida, asustada.
   Antes de abrir sus maletas y después el soponcio que llevaba encima, se tumbó en una de las camas y comenzó a llorar.

3 comentarios:

Dr.Magenta dijo...

Biennn, por fin alguien se ha animado a continuar ¿pero quien? yo tambien olvide firmar al final de la segunda entrega..ahora a continuar, venga...

Estoy dijo...

¿había que firmar?

Dr.Magenta dijo...

como querais, era para reconocernos,puede ser divertido ver en la forma que cada uno cuenta la historia... aunquetambienpuede ser divertido intentar adivinarlo...