lunes, 24 de mayo de 2010

El día de tu cumpleaños

El pasado viernes fue mi cumpleaños, un día en el que uno no puede evitar sentir una curiosa mezcla de sensaciones.
Por un lado el hecho de acumular un año mas a tus ya resentidas espaldas, y lo que es mas importante, evitar que esto no se note demasiado.Basicamente se trata de lucir una esplendida sonrisa todo el día y ejercer de monarca constitucional saludando con la manita a todo el que se acerque y responder con una disfrazada sonrisa Cualquier comentario que te llegue, ya sea amable, sincero, absurdo o impertinente, no importa da igual hay que enseñar dientes como la pantoja. Un poner; se acerca un compañero y delante de más gente te felicita con un:
Felicidades hombre, ¿Cuántos cumples 50? No importa, uno sonríe con impostada naturalidad aunque en realidad te estés cagando en los muertos del gracioso de turno.
El hecho de tener un par de amigos que todavía hoy en el 2010 se empeñan en felicitarte tirándote de las orejas con el bonito y loable empeño de salvaguardar tan absurda costumbre, tampoco ayuda mucho. Obviamente, y llegados a ciertas edades, el tirón de orejas a la par que doloroso resulta sobre todo humillante, especialmente cuando los años a cumplir superan la veintena. Y que decir de ese momento tarta, ese momento en el que uno tiene que hacer como que no se ha dado cuenta de nada aunque en realidad este al tanto de todo lo que va a suceder. Y lo más importante. ¿Qué cara poner cuando se apagan las luces y aparece alguien con una tarta llena de velas (siempre son demasiadas) al tiempo que todo el mundo te canta el “Cumpleaños feliz”
Afortunadamente esto no ocurrió el pasado viernes. Sorpresas hubo y muy agradables. Cuando llegue de trabajar al entrar en casa me encontré con un cartel en el pasillo felicitándome e invitándome a buscar mi regalo. Mi pésimo sentido de la orientación hizo que la búsqueda resultase eterna y eso que el regalo en cuestión no era precisamente pequeño.
Pensaba voz en alto donde estaría escondido y lo tenía justo delante, un maravilloso lavavajillas de media carga y una cafetera nesspreso fantástica y es que servidor es de un cafetero…..

3 comentarios:

TERTULIADISPERSA dijo...

Ahora ya podemos ir a tomar un cafetito en casa del doctor..y además no tendremos que fregar ¡¡felicidades chaval!!

Dr.Magenta dijo...

yo pongo el cafe, la nesspreso y mi savoir affair, vosotrps el guiski.....por cierto ¿quien eres?
jajajjaja

Unknown dijo...

lo malo de los cumples es que a veces se eternizan las celebraciones, pero ¡nos debes una!